El taxo denominado flor de Quito
El Jardín Botánico escogió como flor representativa de Quito al taxo (passiflora tripartita var. mollissima), quizás la designación debió caer en la maigua de la familia de las orquídeas, por su hermosura y lo abundante que es en nuestra ciudad. Sin embargo, el taxo también tiene muchos méritos pues es seguro alimento de aves, como los colibríes y su fruto los quiteños lo consumen en helados y batidos. Pertenece a la familia botánica de las pasifloras, nombre que inmediatamente evoca a las medicinas sedantes, especialmente efectivas para estados ansiosos. Aparte del taxo, en el país se cultiva la granadilla (passiflora ligularis), que se la encuentra con facilidad en el mercado y aparte de sus cualidades nervinas, constituye un alimento suave para los niños y puede ser favorable a la digestión. En la Costa crece la badea (passiflora cuadrangulares), que tiene fama de combatir los parásitos intestinales, puede producir vómito y es un narcótico potente. Otra pasiflora, no originaria del Ecuador, se siembra también en nuestro medio y su consumo es alto: la maracuyá, que fue traída desde el Brasil. El término procede del guaraní y ha sido declarada la flor nacional del Paraguay. Se considera, entre las pasifloraceas, la más sedante y las publicaciones sobre medicina naturista la recomiendan para combatir el insomnio, siempre y cuando la persona no padezca de problemas en el aparato digestivo. Es fuertemente ácida. El nombre de pasifloras, surgió de la semejanza que vieron en la flor los científicos con los instrumentos de la pasión de Cristo. Citando a Lindley, autor del Tesoro de la Botánica, Luis Cordero en su Enumeración Botánica, dice que: “Los tres clavos están representados por los tres pistilos; las cinco anteras de los estambres significan las cinco llagas; los rayos de gloria o la corona de espinas tienen su representación en la corona de la misma flor; las 10 partes o hojuelas de periantio (que parecen pétalos) denotan a los 10 apóstoles exceptuados Pedro, que negó a Cristo y Judas, que lo vendió. Las hojas digitadas de la planta representan las inicuas manos de los judíos que lo prendieron, y los zarcillos y ganchos de la misma, las cuerdas con que ignominiosamente lo ataron”. De esta manera, la ciencia Botánica se vio impregnada del mito cristiano, tal como se lo ha estructurado en estos 2 000 años, en relación con la muerte de Jesús. El taxo, al ser una planta trepadora, se enreda en distintos árboles, llegando a crecer tan frondosamente que cubre con su follaje las copas, matando en ocasiones a la planta que le hospeda. También fue conocido con el nombre de grulla, el cual no es utilizado en las ciudades y únicamente daría lugar a confusiones, si se solicita la fruta con esa denominación. No hay duda que cuando se adopta a algún componente de la naturaleza como símbolo, detrás de ello hay una coincidencia significativa. Tomando en consideración las características de esta trepadora, podemos encontrar una poderosa fuerza que le permite sobrevivir a pesar de grandes dificultades. De la misma manera, Quito no ha sucumbido en casi 500 años, a pesar de los terremotos y malos gobiernos
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Colombia : país rico en especies de taxo
La curuba, taxo, tambo, parcha o poroksa (en quechua) es unapassiflora nativa de la Cordillera de los Andes en la selva alta. La fruta se consume desde la época precolombina en países como Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia.
Un estudio de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.), Sede Palmira, concluyó que de las 64 especies de curuba que existen en América del Sur, 33 se encuentran en Colombia. De estas, 22 son endémicas.
“La mayor diversidad de estas especies se conserva entre los 2.500 y 3.000 metros sobre el nivel del mar [m.s.n.m]. Esto indica que se encuentran en la zona de Los Andes, La Sierra Nevada de Santa Marta y la Sierra de La Macarena”, afirmó el profesor Miguel Bonilla.
Según reporta Agencia de Noticias UN, el motivo por el que crecen en estos lugares es que cuentan con las condiciones óptimas para su desarrollo, es decir, temperaturas inferiores a los 13°C y donde las lluvias o precipitaciones no superan los 1.300 milímetros al año.
Bonilla explicó que, para identificar las especies de curuba se utilizó una base de datos construida a partir de información de las etiquetas de ejemplares botánicos depositados en 85 herbarios, consultados de manera presencial y en línea. Una vez tabulada y analizada la información, se generó un mapa de distribución y se georreferenciaron las especies que permitieron realizar el programa de recolección de germoplasma en las salidas de campo.
Lo anterior permitió conocer que la mayor riqueza del género Passiflora supersección tacsonia (curuba) se concentra en la cordillera Central y Oriental, con un número estimado de 11 a 14 especies. Inclusive se determinó que podría haber más especies sin explorar en Nariño y Putumayo -departamentos colombianos al suroeste del país-, donde el acceso para las personas es difícil debido al terreno o a los problemas de orden público.
La investigación, que es parte de una tesis de la Maestría en Ciencia Biológicas, también reveló que estas 64 especies de curuba existentes en Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú y Bolivia se encuentran en cierto grado de amenaza, detalló Agencia de Noticias UN.
Los resultados arrojados fueron: 84% de las especies presenta un grado de amenaza; 41% está en peligro; 17% es vulnerable; y 26% está en peligro crítico.
Bonilla destacó que con estos hallazgos se pretende generar conciencia en el Gobierno colombiano para que se creen políticas de conservación de la Passiflora.
Igualmente, se busca ampliar la brecha frutícola sobre la curuba y su potencial comestible que actualmente se centra en la curuba de Castilla y la curuba india.
Helado de Paila
Aqui les compartimos una exelente receta de Helado de Paila la cual les puede servir como un sorbete en el menú de 7 servicios el mismo que se usa antes del primer principal, en nuestro caso lo hicimos de frambuesa y taxo.
INGREDIENTES:
1000 gr de la pulpa de fruta a selección
250 gr de azúcar
2 unid clara de huevo batidas a punto de nieve
PREPARACIÓN:
Para comenzar hacer el helado necesitamos tener una cama de hielo en un recipiente con sal para que evitar que se diluya, sobre esta colocar una paila de bronce.
Aparte en una licuadora colocamos la pulpa de frutas con el azúcar y licuamos para luego poner esta mezcla en la paila de bronce y empezamos a mover la paila en forma circular y a un ritmo veloz hasta ver que se cuaje ayudados con una espátula de madera que irá removiendo lo que se va cremando hacia la superficie para que sea una mezcla uniforme y al comenzar su cremosidad adicionamos las claras de huevo y batimos hasta conseguir el helado.
Pasamos la mezcla a un recipiente y congelamos, para su servicio ayudados de un saca bocados o saca bolas hacemos pequeñas porciones y servimos como un delicioso sorbete.
